"Star Wars: Episodio IV - Una Nueva Esperanza" es la cuarta película en términos de lanzamiento, pero la primera en la cronología interna de la saga Star Wars, estrenada en 1977 y dirigida por George Lucas.
La película comienza con la princesa Leia Organa (interpretada por Carrie Fisher) robando los planos de la Estrella de la Muerte, una estación espacial imperial con el poder de destruir planetas enteros. Leia envía los planos a través de la unidad R2-D2, que termina en el planeta desierto Tatooine junto a su compañero C-3PO.
Los droides son encontrados por el joven granjero Luke Skywalker (interpretado por Mark Hamill), quien vive con su tío Owen y su tía Beru. Luke descubre un mensaje holográfico de Leia dirigido a Obi-Wan Kenobi (interpretado por Alec Guinness), un Jedi exiliado.
Acompañado por Obi-Wan y los contrabandistas Han Solo (interpretado por Harrison Ford) y Chewbacca (interpretado por Peter Mayhew), Luke parte en una misión para rescatar a la princesa Leia y destruir la Estrella de la Muerte. A lo largo del camino, Luke aprende sobre la Fuerza y se convierte en un aprendiz Jedi.
La película culmina en una emocionante batalla espacial mientras los rebeldes atacan la Estrella de la Muerte. Luke se enfrenta a Darth Vader (interpretado por David Prowse, con la voz de James Earl Jones) en un duelo de sables de luz y logra destruir la estación espacial con la ayuda de la Fuerza.
La película concluye con la victoria de los rebeldes, la entrega de los planos robados y la celebración de su triunfo. "Una Nueva Esperanza" establece los personajes principales, la lucha entre la Alianza Rebelde y el Imperio Galáctico, y presenta los conceptos fundamentales de la Fuerza y los Jedi que continuarán siendo centrales en la saga.
No hay comentarios:
Publicar un comentario